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Historia viva

El Mundial de Superbike volvió a la actividad después de un largo receso invernal y las novedades no tardaron en producirse. Ganadores seguros, podios inesperados, terribles choques y una increíble paridad entre las marcas.

Informe: S.C. – Fotos: Prensa y archivo ERRE

El certamen de WorldSBK vivió sus dos primeras rondas con mucha intensidad en el inicio de una nueva temporada. A pesar de las victorias iniciales de Jonathan Rea y Kawasaki en las Race1 y SuperPole Race de Aragón, Álvaro Bautista contrarrestó con Ducati en la prueba complementaria y calentó el ambiente para la segunda cita en Assen.

Allí, en los Países Bajos, la latente rivalidad entre Toprak Razgatlioglu y Jonathan Rea hizo eclosión en las primeras vueltas de la Carrera2, por lo que Bautista sacó provecho de ese incidente y encarará la tercera etapa en Estoril como líder holgado del campeonato.

Pero, además del ‘choque de estrellas’ entre los líderes de Yamaha y Kawasaki en la Race2, en Assen también se produjo otro hecho que marcó historia. Por primera vez en cinco años, cinco distintos fabricantes se repartieron los cinco primeros puestos en la clasificación final de la carrera.

Álvaro Bautista obtuvo su tercera victoria del año en su regreso a Ducati y, con ella, el triunfo número 19 de su trayectoria en SBK (al igual que su dorsal). Su escolta fue Andrea Locatelli (Yamaha), quien obtuvo así el mejor resultado de su campaña deportiva. Completó el trío de punta, el español Iker Lecuona, que de esta manera le brindó a Honda su podio número 340. El cuarto puesto fue para Alex Lowes (Kawasaki), logrando su mejor clasificación de 2022 hasta el momento; mientras que Scott Redding (BMW) heredó la quinta posición después de una sanción a Axel Bassani (Motocorsa Racing) por pisar con su Ducati fuera de los límites de la pista en el transcurso de la última vuelta.

El hecho que cinco marcas diferentes ocupen las cinco primeras posiciones no es un escenario nuevo, ya que sucedió al menos otras 37 veces en el historial de WorldSBK, algo que demuestra la paridad existente dentro del campeonato de las motos de producción. La primera vez que ocurrió fue en Sugo en 1989, con Michael Dowson a bordo de una Yamaha ganando en un quinteto integrado por Kenichiro Iwahashi (Honda), Giancarlo Falappa (Bimota pero con motor Yamaha), Doug Polen (Suzuki) y Takahiro Sohwa (Kawasaki).

Más tarde, la primera vez que se repartieron las marcas en las cinco posiciones de vanguardia (y todos con su propio motor), fue en la fecha final de 1996 disputada en Phillip Island. Allí, Anthony Gobert ganó con una Kawasaki por delante de la Yamaha de Colin Edwards, mientras que Troy Corser se aseguró el título para Ducati con una tercera posición, Carl Fogarty fue cuarto en su última aparición para Honda y quinto cruzó la meta el ídolo local Peter Goddard, con una Suzuki.

La última vez que cinco fabricantes estuvieron entre los cinco primeros al final de una carrera fue en la carrera 2 de Portimao, en 2017. En esa ocasión, Jonathan Rea ganó a bordo de una Kawasaki, Michael van der Mark fue segundo con Yamaha, Marco Melandri tercero con Ducati, cuarto Eugene Laverty con Aprilia y quinto Jordi Torres con BMW.