Un campeonato loco. Sin el máximo candidato en pista, las carreras se convierten en una lotería. Ayudan a la incertidumbre: la falta de constancia de los favoritos, situaciones límites, e impresionantes accidentes.
El 16 de agosto de 2020 será recordado como el día que Valentino Rossi y Maverick Viñales salvaron sus vidas. Todo sucedió en las primeras vueltas del GP de Austria, cuando Johann Zarco le cerró la marcha a Franco Morbidelli en un sector de máximo riesgo y sus motos, luego del encontronazo, salieron disparadas sin control hacia el pelotón que estaba transitando la curva más cerrada del trazado.
Rossi vio como la Yamaha #21 pasó a milímetros del carenado frontal de su moto e, instantes después, la Ducati de Zarco le cayó del cielo, rebotando como una pelota de tenis, a un palmo de su casco. Otro tanto sucedió con Maverick Viñales, quien tuvo ciertos reflejos y al disminuir su marcha vio como los “misiles de dos ruedas” pasaban muy cerca suyo.
Hasta allí, la carrera era una delicia, por la lucha en la punta entre Pol Espargaró, Jack Miller, Alex Rins, Joan Mir y Andrea Dovizioso. Con el reinicio después de la bandera roja, Pol no fue el mismo y terminó por los suelos arrastrado por Oliveira, Rins tuvo un exceso de confianza y también se cayó cuando iba por la delantera y Andrea Dovizioso disfrutó del plato frío de la venganza con una soberbia victoria.
El viernes, desde Ducati anunciaron que después de las dos carreras de Austria (el domingo se corre allí de nuevo), decidirían el futuro del piloto italiano. El sábado, Dovizioso se sacó el anillo de compromiso y manifestó que se iba por su cuenta, que no seguía en la escuadra roja.
Su victoria en Spielberg, acompañado en el podio por Mir y Miller, lo posiciona como el gran candidato de un campeonato que es una incertidumbre total. Viñales y Quartararo, rápidos en clasificación volvieron a fallar en carrera. Pareciera que están corriendo para Marc Márquez. De sacarle 50 puntos en las dos primeras carreras ahora solamente le llevan solo 65 con cuatro corridas. Desde Cervera, el campeón se ilusiona, si regresa con ímpetu, capaz que llegue a luchar por la corona…
En Moto 2, también hubo un pavoroso accidente que se saldó sin consecuencia luego que Hafizh Syahrin se llevara puesta la moto atravesada en la pista de Enea Bastianini. Después de la bandera roja, prosiguió el dominio de Jorge Martín y así llegó a su primera victoria en la clase, por delante de Luca Marini (nuevo líder del certamen) y Marcel Schrotter.
No hubo bandera roja en Moto3, pero sí un final de infarto. La carrera mantuvo un pelotón de veinte participantes en pugna por la victoria. En las vueltas finales, se decantó el lote pero quedaron diez. El triunfo fue para Albert “Superman” Arenas, por delante de Jaume Macia y John McPhee, luego que Ai Ogura, Celestino Vietti y Darryn Binder fueran sancionados por excederse fuera de los límites de la pista en los metros finales.
La revancha será el próximo fin de semana con el GP de Styria, en el mismo escenario.