Juego de palabras para reflejar el cambio que se produzco en la punta del campeonato de Superbikes luego del paso por Aragón. Ducati mandaba, pero apareció Rea.
Todo indicaba en la previa que Ducati sería la dominadora exclusiva en el trazado de Motorland. Así arrancó el viernes y siguió el sábado con la victoria de Scott Redding en la primera carrera. Pero todo cambió a partir del domingo con un Jonathan Rea inalcanzable que se quedó con la SuperPole Race y la segunda competencia.
La nueva incorporación de Ducati se tomó las cosas con calma en la primera carrera del sábado y de a poco fue acortando la distancia con la Kawasaki del poleman, para superarlo y marcar un nuevo 1-2 del equipo oficial al ser escoltado por su compañero Chaz Davies.
Temprano el domingo, Rea no tuvo compasión para liderar de punta a punta en la carrera que acomoda la grilla de partida para el último enfrentamiento del día y aventajó en la línea de sentencia a su rival Redding y a la Yamaha de Michael Van Der Mark.
En la prueba definitoria, otra vez la moto con el #1 se escapó de entrada y solamente se vio acosada por un intento de Chaz Davies, que lo superó hasta cuatro veces en la misma vuelta, para ponerle un poco de pimienta a la lucha por la punta. Tranquilo en el tercer lugar, Álvaro Bautista puso de nueva a Honda en el podio, un sitial que no ocupaba desde Magny-Cours 2016 con el holandés VDMark.
Para Leandro Mercado, no hubo suerte el domingo después de haber terminado en el puesto 11 de la primera competencia (había largado desde el cajón número 15 y llegó a figurar décimo). Ni bien comenzada la SuperPole Race, Tom Sykes se salió de pista en el “sacacorchos” del trazado español y regresó con tal vehemencia al asfalto que impactó contra la Ducati del argentino. La caída le produjo un esguince de tobillo que no le permitió participar del resto de la programación y ahora debe aguardar por una rápida recuperación para poder participar de una nueva fecha por el campeonato el próximo fin de semana, allí en el mismo trazado aragonés.