Accesorios

Transmisión aceitada

Para la moto, existen varios varias formas de transmitir las revoluciones del motor desmultiplicadas por la caja de cambios a la rueda trasera. Las más conocidas son la cadena, el cardan, las poleas CVT y la correa dentada en algunos casos.

La cadena es un elemento mecánico formado por múltiples piezas encargadas de transmitir el movimiento y la fuerza generada por el motor a la rueda motriz. Este elemento, el más común en este tipo de vehículos, es sometido  permanentemente a enormes esfuerzos y tensiones, elevadas temperaturas por fricción y en un ámbito donde se encuentra a merced de elementos con muchos factores de desgaste: agua, polvo, grasitud de la misma moto o de otros vehículos, etc. Esto, en condiciones donde la lubricación no es permanente como en un motor, en una caja de cambios, o en una transmisión cardánica.

Además, hay que sumar que la cadena (por su diseño mismo), es una forma poligonal que debe moverse en forma circular. Este diseño poligonal está dado por la distancia entre las uniones de los eslabones. Y, así como en la corona esta forma poligonal es más abierta (siendo la fricción menor), en el piñón, esta situación es más complicada. El menor diámetro aumenta la fricción entre las caras en contacto de los eslabones. Los eslabones se mueven a diferentes velocidades en cada una de estas ruedas dentadas lo que aumenta la temperatura y el desgaste.

Este movimiento continuo genera fricción en los eslabones al ingresar en los dientes de la corona y del piñón, además de golpes repetitivos por el contacto metal-metal, y todo esto sin un elemento lubricante de extrema presión (EP) de por medio, como sucede en los engranajes de la caja de cambios.

En una caja, los aditivos de extrema presión del lubricante, compuestos de elementos pesados como el zinc y el fósforo actúan como una película de sacrificio que disminuye el contacto directo entre metales, disminuyendo el desgaste de los dientes del engranaje. Por obvias razones, esta lubricación continua no sucede entre la cadena y el conjunto piñón-corona; por lo que se requiere mantener este elemento lo más limpio y lubricado posible (hay que considerar que cada eslabón se comporta como un muñón en un cojinete, al engranar en la rueda dentada).

Otro esfuerzo al que es sometida la cadena es a la tensión que se produce debido al descentrado de los ejes secundarios respecto al pivote de la suspensión trasera. Por ello, es importante centrar la rueda correctamente cada vez que se desmonta la rueda trasera. Incluso el movimiento basculante de la horquilla trasera varía la velocidad de la cadena respecto a los dientes de los engranajes, a la vez que produce estiramientos y holguras. Esto se debe a que en la mayoría de las motocicletas el pivote de la horquilla trasera no coincide con el eje del piñón. Marcas como BMW, en sus modelos a cadena, soluciona este asunto haciendo estos ejes coincidentes. Otro esfuerzo a considerar son las tensiones que provocan el frenado y el arranque; aún atenuados por el manchón de la rueda, no son menos despreciables.

Aunque se considera a la cadena un elemento fácilmente reemplazable y no concite la atención que merece, se considera que un buen mantenimiento aumentará su confiabilidad y no fallará el momento menos esperado. Un mantenimiento simple y adecuado prolonga su vida útil y, aunque mínimamente, reduce el consumo y el esfuerzo del motor. Sin embargo, la mejor lubricación es poco efectiva sin una correcta limpieza.

Hay que tener en cuenta que el polvo sumada a cierta aceitosidad del camino, forman una pasta abrasiva que con la temperatura se endurece y adhiere firmemente en las caras de los eslabones. Usar agua a presión o un cepillo muy duro puede traspasar el sellado de las juntas tóricas (O’Ring), arruinando la cadena. Utilizar solventes también puede afectar los sellos, además de tener efecto corrosivo en la parte metálica.

Es por esto que existe el lubricante Motul Chain Clean. Este producto posee la solvencia necesaria y la presión de aplicación justas para remover todos estos depósitos de suciedad, sin afectar sellos; por lo que permite que se adhiera todo el lubricante aplicado. Una vez completa la limpieza a fondo, la lubricación debe hacerse eligiendo el producto específico para cada aplicación: Motul Chain Lube Off Road es para cadenas de motos fuera de terreno y cuatriciclos. Este producto posee no solo una gran capacidad adherente, sino también antiestática, disminuyendo la adhesión del siempre presente polvo abrasivo.

En el caso de cadenas de motos para calle, ruta o incluso pista y kartings, donde la temperatura y la centrifugación son los principales problemas, Motul Chain Lube Road Factory Line es el producto indicado. Se trata de un lubricante que disminuye la temperatura de trabajo gracias a un tecnología antifriccionante exclusiva: la tecnología Boron-Tech a base de nitruro de boro, uno de los compuestos antifricción más poderosos que se conoce. Este elemento es el que le da su característico color blanco, a diferencia de otros productos donde la visualización se debe a colorantes puramente estéticos. Reducir la fricción radicalmente como ocurre con Motul Chain Lube Road FL disminuye enormemente la temperatura de trabajo. Esta menor temperatura ayuda a mantener al lubricante en su lugar evitando el centrifugado.

Los lubricantes Motul Chain Clean poseen una solvencia prefijada que permite la total penetración del lubricante en todos los elementos de la cadena y que permite utilizar la cantidad justa, evitando el exceso y su salpicado, por lo que no ensucia otras partes de la moto o la vestimenta del piloto. Los lubricantes Motul Chain Clean Off Road y Motul Chain Clean Road FL se comercializan en envases de 400 ml y de 100 ml fácilmente transportables en la moto.

Informe y fotos: Alberto R. Müller (E-mail: a.muller@tecsyn.com.ar) / Responsable TEcnico Motul Argentina